Mucho, mucho tiempo llevo sin escribir en esta pared. La nostalgia me ha traído nuevamente a este rincón olvidado de la red. Todo está aquí en tinieblas, hasta que otro lo descubre y lo aprovecha. Una caja de pensamientos cruzados, patentados, y a la vez sin interés. Pero quiero escribir, porque escribir me libera, me tranquiliza y me ordena.
Estoy en un período maduro de mi vida, aunque siempre inquieta por aprender algo más, por estudiar más. El cerebro nos pide abrirnos a las inquietudes, aunque reconozco que tuve un debate para elegir y tuve que irme a lo práctico según la realidad, lo rescatable es que de todas maneras estoy propiciando agilidad a mis neuronas, que se mantengan y aumenten las conexiones dendríticas a fin de que no se envejezcan y produzcan corte circuito antes de tiempo.
Cómo me gustaría quitar algunos archivos guardados en esta RAM. Imágenes y sensaciones que vuelven a mi cabeza de cuando en vez y perturban mi serenidad.
Porqué tienes que gastar segundos en recordar a quienes no valen la pena, exclusivamente por lo que en su momento me hicieron vivir, sentir, pero es injusto que ronden ¡toda la vida!
Creo que he llegado a la meseta de mi vida, creo que de aquí en adelante será lineal, espero que la compañía que he elegido continúe junto a mí por mucho tiempo más.
Cambio y fuera.
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